viernes, 27 de julio de 2012

Razonamientos Aleatorios

Ha pasado bastante tiempo desde que escribí por última vez. Las aguas desde las que escribo ciertamente tienen más calma ahora, más tranquilidad para pensar, para reflexionar y además, para escribir.


La entrada se llama como el blog porque hoy, después de haber asistido a una charla sobre movimientos sociales donde participó un hombre muy inteligente, me dí cuenta que nunca había dedicado una entrada al acto mismo de pensar, al razonar aleatoriamente, o libremente como prefiero llamarlo hoy. Este hombre que estaba en la charla, una persona vinculada al mundo de la educación y la filosofía, describía justamente a la filosofía, como la rebeldía del pensamiento, y esa frase me inspiró para escribir hoy, voy a escribir sobre la rebeldía de pensar.


Antes de seguir, voy a reflexionar un momento sobre la frase con que la el hombre que describí antes se refirió a la filosofìa. Puedo decir que concuerdo plenamente, el acto de pensar libremente sí es un acto de rebeldía, y siempre ha tenido costos asociados, quizás antes eran costos más graves que ahora, pero siempre ha tenido contras. En la Edad Media o durante la inquisición el pensar libremente podía ser un motivo para terminar en la hoguera, por ejemplo. Y un costo que ha tenido y tendrá siempre, es que el buscar la verdad a través del pensamiento libre y sin ceñirse a sistemas dogmáticos que "explican" todo en base a normas incuestionables, siempre se corre el riesgo de frustrarse por no poder encontrar esa verdad. Al final del día, el libre pensar involucra un riesgo, pero aún así sigue siendo una actividad maravillosa que debería cultivarse mucho más. Ahora sí, continuo con la entrada.


Como dije antes, voy a entender el razonar aleatoriamente como el pensar con libertad, sin ataduras, y teniendo como limites sólo los impuestos por uno mismo. El pensar es para mi, una de las características más notables de la condición humana (sino la más notable). No solo visto como motor de grandes cambios en la humanidad, sino como actividad misma, es sencillamente notable. Dentro de nuestra cabeza se encuentra el computador más poderoso que puede haber, capaz de hacer vínculos extremadamente complejos de información, al mismo tiempo que maneja recuerdos de todo tipo y guarda las experiencias vividas para no cometer los mismos errores (idealmente).



Pienso que la función del razonamiento no está del todo valorada en el desarrollo de las personas en este país. La formación académica de los niños pequeños y los adolescentes está enfocada a que reciban y retengan gran cantidad de información: fechas, datos, teoremas,formas, métodos, etc. Y se considera "mateo" o "inteligente", a aquel niño que puede repetir todo lo que aprendió en el colegio. En ningún caso se valora o motiva a los niños que tienen pensamientos propios, que pueden tener o no que ver con la materia; no estoy diciendo que los niños que aprenden todo lo que les dicen los profesores sean tontos, sólo digo que los "otros" niños no son estimulados como se debería. Aquí se educa, en general, pensando que lo que dice el profesor en un aula es la verdad, sólo porque lo dice el profesor; en mi opinión no puede haber hecho más nefasto para la capacidad de razonar que ese, se bloquea inmediatamente cualquier duda o cuestionamiento que pueda tener el alumno. Y se termina bloqueando la posibilidad de alcanzar lo más lindo del acto mental, que es crear, crear conocimiento, cultura, arte, etc.

Voy a exagerar conscientemente a partir de eso último que escribí. El tener un sistema educacional que fomenta el no cuestionar nunca nada puede ser una causa importante de la gran cantidad de injusticias sociales que se permiten en el país. Nadie está acostumbrado a llevar la contra al status quo, y cuando alguien lo hace, es inmediatamente apaleado por la política y la prensa, incluso por el resto de la sociedad, que aún sin saberlo, han perpetuado un sistema que ya dio muestras de no funcionar.



Lo que le interesa a los gobernantes y a la gente que maneja los países (no a los políticos, me refiero a los que realmente los manejan) es el dichoso progreso, entendiendo que ellos le llaman progresar a la creación de riqueza, es en ese juego sucio donde el pensar pierde valor, porque lo que necesitan ellos son ciudadanos suficientemente instruidos como para ocupar cargos y desarrollar tareas, y lo suficientemente carentes de espíritu crítico como para preguntarse por qué hacen lo que hacen todos los días cuando salen de sus casas en las mañanas, o por qué la sociedad está como está.




En mi opinión, lo que se necesita, es un cambio de cultura, o de paradigma como se dice actualmente. Se necesita volver a creer que el pensar tiene valor por sí mismo, que no es necesario que el pensamiento esté dirigido hacía algo en particular. El sólo hecho de razonar sobre algún tema, de que cada persona tenga tiempo y valore el reflexionar sobre lo que sea, ya hace ciudadanos más conscientes, más críticos, y según yo, ese es un buen camino por el que se podría transitar hacía una mejor sociedad. Quizás nunca se logre el cambio completamente, al menos me queda la tranquilidad que cada vez hay más gente que piensa y a menor edad, ojalá el tiempo lleve a la humanidad a cuestionarse si la vida actual que vivimos es la que queremos vivir, o si sólo la estamos viviendo porque de esa forma se vivía cuando llegamos al mundo.