
Hace mucho tiempo que tenía ganas de escribir sobre este tema, pero siempre me detenía la sensación de que la respuesta a la pregunta que planteo en el titulo era trivial. Pensaba que el cuestionamiento era casi estúpido para la mayoría de la gente y que no necesitaba una meditación muy profunda. Pero algo esta semana hizo que me diera cuenta que hay personas que defienden el "otro" punto de vista con mucha pasión, el que yo creía que nadie elegiría. Esto me terminó de motivar y decidí escribir sobre esto.
Qué pasaría si en algún momento de nuestra vida llegásemos a una bifurcación como la que se plantea en el titulo. Es obvio que lo ideal sería poder alcanzar los dos estados en paralelo, pero ese caso es aburrido de analizar. Lo interesante viene cuando se piensa que se puede escoger uno sólo de esos caminos para seguir en la vida, cuando pensamos que son casi excluyentes. Habrá que analizar objetivamente los pro y contras de cada opción, pero también juega mucho la personalidad, el carácter, el criterio, el pasado y la forma de ver la vida de cada persona, es justamente este elemento de subjetividad el que hace que la pregunta sea interesante.
Para respetar el orden alfabético del titulo, comienzo con la riqueza. Lo primero que relaciono con la riqueza es alcanzar el estilo de vida que cada persona sueña, desde vivir relajado en una isla paradisíaca hasta vivir el lujo máximo de hoteles, casinos, aviones y demás. Pero la riqueza trae consigo otras cosas "buenas", lo pongo entre comillas porque estas cosas son positivas para la persona que posee riqueza pero no estoy muy de acuerdo con que ocurran así. Es sabido que la gente más rica es tratada con mucho más respeto que la gente común, este comentario suena resentido o algo así, pero objetivamente creo que es cierto en la mayoría de los casos. En general pienso que la vida se vuelve más disfrutable para las personas que alcanzan una fortuna considerable, dicen que el dinero trae responsabilidades mayores, pero creo que de todas formas el saldo es positivo para las personas más adineradas. La riqueza tiene algunos aspectos negativos que también se deben considerar, con el dinero llegan muchas personas buscando amistad o algo más sólo por interés, esto les debe provocar a las personas ricas algún tipo de inseguridad muy desagradable sobre la gente con la cual se relacionan. Al final, creo que la riqueza entrega la opción de aprovechar y vivir lo que el mundo ha creado (lo bueno y lo malo) como cada cual lo desee, uno podría darse lujos increíbles o tener acceso a lugares y sensaciones únicas, pero por otro lado podría experimentar desilusiones o frustraciones personales tan grandes que no logren otra cosa sino complicar la existencia en demasía.
En la otra esquina está la sabiduría. La primera consecuencia positiva que se me viene a la cabeza sobre ser sabio, es la seguridad casi absoluta que se tendría con respecto a la vida en general. Siempre se ha dicho que los humanos, en general, le tememos a lo desconocido, luego si no desconociéramos nada reduciríamos casi totalmente nuestros miedos. Pero para mi, el aspecto más cautivador de alcanzar una sabiduría más allá de la norma es la sabiduría per se. El hecho de poder comprender casi totalmente cada cosa que uno se proponga, el tener dominio sobre las ciencias o las artes o el poder ayudar a que la humanidad avance son motivaciones bastante grandes en mi opinión. Pero creo que también hay aspectos negativos en tener esta condición, el manejar tal cantidad de información y comprender casi a la perfección cualquier cosa podría llegar a presionar mucho psicológicamente a una persona a tal punto de volverla loca o algo así. Cómo conclusión, pienso que la sabiduría entregaría una confianza tan grande que haría de la vida algo mucho más fructífero, pero por otro lado, alcanzar un nivel de comprensión y conocimiento tan elevado puede llegar a quitar toda la emoción de vivir, porque siempre se sabrá o al menos intuirá lo que va a ocurrir.
En los párrafos anteriores traté de exponer los que yo considero son los argumentos objetivos que hacen de cada opción más o menos tentadora. Los argumentos subjetivos los debe agregar cada persona, porque dependen sólo de ella misma. Ahora bien, creo que no se puede lograr ni la riqueza ni la sabiduría absoluta, por un lado si la riqueza total del mundo estuviese concentrada en una sola persona lo único que habría sería caos y por otro, cuando vamos sabiendo y comprendiendo más y más, siempre surgen nuevas dudas o cuestionamientos que nos obligan a seguir estudiando o pensando.
En mi caso personal, elijo la sabiduría. Hasta hace algunos días pensaba, tal vez ingenuamente, que esta era la opción de la mayoría, pero no es así. Mis motivos subjetivos se basan en que yo le entrego un valor agregado a alcanzar algo que no todo el mundo podría alcanzar. El dinero está a la mano de cualquier persona que logre hacer un buen negocio o que tenga un golpe de suerte, pero el conocimiento sólo puede ser dominado por algunos pocos, muchos lo buscan pero a la meta llega un porcentaje mínimo, esto es, en mi opinión, lo que le confiere a la sabiduría un valor especial por sobre poseer riqueza. Finalmente, creo que la Riqueza es el camino a "vivir" la vida y la Sabiduría el camino a comprenderla. Lo más probable es que nadie nunca se encuentre en la situación extrema donde le dan a elegir qué camino seguir, pero uno puede tratar de encaminar su vida hacía el que prefiera. Cómo dije en el párrafo anterior, ninguna de las dos se puede alcanzar absolutamente, pero está en cada uno de nosotros saber cual es el camino que nos estregará mayores satisfacciones personales, aún cuando sepamos que, muy probablemente, no consigamos el objetivo final.
Hasta La Próxima!
EDO