viernes, 19 de agosto de 2011

El futuro no es ninguno, de los prometidos en los 12 Juegos.

Tal como la entrada anterior, usé una canción para darle título a la entrada, pero no es cualquier canción, es el himno que representa todo lo malo del sistema educacional chileno, El Baile de los que sobranCreo que el tema que trataré no necesita mayor introducción, voy a hablar sobre el conflicto educacional, no desde una perspectiva técnica, para ello me parece que hay mejor material y argumentos que los que yo podría exponer aquí, para muestra el siguiente link a 10 columnas de Fernando Atria sobre mitos comunes en la educación: 10 Lugares comunes sobre la educación chilena.
Voy a abordar esta entrada desde una perspectiva casi totalmente sentimental, quizás no aparezca ningún argumento técnico pero no me importa (ya habrá tiempo en otra entrada para eso), el tema exige ser pasional tanto como técnico y racional.

Para comenzar un breve y obvio diagnostico de la educación chilena. Tenemos un sistema que excluye, casi inexorablemente, a los más pobres y a los más desfavorecidos, que los deja pateando piedras como dicen Los Prisioneros y parece que no nos importa en absoluto. Estudiar en la educación pública básica y media es casi condenarse a no ser que se estudie en un liceo emblemático o algunos otros casos especiales. La educación es la base sobre la que se construyen los pueblos y las sociedades, ningún país que aspire a ser considerado desarrollado puede tener un sistema educacional tan efectivo para segregar clases sociales y destruir futuros como el chileno.
No puede ser aceptable que cuando un estudiante que viene de una familia pobre logra entrar a la universidad sea considerado una sorpresa suficiente como para hacer un reportaje televisivo, simplemente no es concebible. Debería darnos vergüenza que este hecho constituya una hazaña dado que esto es justamente lo que se espera de la educación. La educación DEBE ser el motor para aspirar a una mejor calidad de vida y una mejor sociedad. La educación debe ser la forma de darle un poco de justicia y devolverle la mano al niño que nació en un entorno que no eligió, debe constituir al menos una herramienta para quebrar el destino que le fue impuesto antes de nacer.
 El sistema chileno hace justamente lo contrario. Los municipios más pobres y con mayores problemas sociales como delincuencia o drogadicción tienen peor educación pública dado que son estas mismas municipalidades sin recursos las que deben sostener sus colegios. Entonces para la gente más necesitada y con mayores carencias tenemos disponible la peor educación, y ni hablar de ir a un colegio privado, ni siquiera se tiene opción, un niño que nació pobre está casi condenado a tener mala educación básica . Desde ahí el asunto ya se puso jodido, mala educación básica implica no poder acceder a una buena educación media dado que los mecanismos de selección de los buenos liceos se basan en el conocimiento adquirido antes.
Esta rápida y obvia radiografía de nuestra educación ya debería bastar para tener hordas de gente de cabeza tratando de solucionar el problema, pero parece que los políticos y gobernantes no lo creen así, hay cosas más importantes para ellos. El estado debe velar por el bien de sus ciudadanos y no al revés.

En un país que genera tan bien riqueza y que la distribuye tan mal como Chile se necesita tener un sistema tributario que trate de empatar la cancha al menos en educación, que los más ricos puedan ayudar a emparejar la situación con un poco de solidaridad tributaria. En este país tenemos gente con ingresos comparables a los de Noruega y otros comparables a los de Uganda, el promedio nos deja un número suficientemente bueno para creernos los jaguares de Sudamérica pero claramente estamos lejos de serlo. Nadie está pidiendo que con el dinero de los ricos le demos casa y auto a los más pobres o que expropiemos sus terrenos, sólo se pide que los más adinerados puedan poner un poco más para darle la herramienta básica para surgir a los más necesitados, la educación de calidad.

Es imperioso que el Estado, y no las municipalidades, sea quien se haga cargo de la educación básica y media. Para asegurar una distribución justa y equitativa de recursos a cada establecimiento y en consecuencia a cada alumno. Otro punto importante es terminar con el "fin de lucro" en los colegios, no puede ser que existan establecimientos que sólo permitan correr el agua de los baños dos veces al día para abaratar costos y así tener mayores utilidades. No puede ser que al final del año un colegio con grandes utilidades piense que lo hizo bien independiente de la calidad de educación que entregó. Que no haya fines de lucro no quiere decir que alguien que ponga un colegio deba hacerlo por nada, es justo que reciba una retribución pues está haciendo un bien a la sociedad, el punto que es que no debe ser su ideal el forrarse de dinero haciéndolo.

El caso de la educación superior constituye un negociado inaceptable con los recursos de todos los chilenos. Tenemos un montón de universidades privadas con fines de lucro (aunque la ley no lo permite, pero a quien le importa la ley) que le venden humo a miles de jóvenes, les prometen que entrando en sus aulas accederán a una vida maravillosa y que el camino universitario es el camino al éxito, Falso!. Estas paupérrimas "universidades" invierten millones en publicidad para atraer a la gente con menos percepción de calidad, que es justamente la gente más pobre, la que tuvo que lidiar con una calidad aberrante de educación básica y media. La idea es que lleguen alumnos beneficiados con créditos o becas (así entra dinero a la universidad), darles en bandeja 2 o 3 años de carrera para entusiasmarlos y que paguen su matrícula, y luego "rajarlos" y echarlos a la calle (este proceso se podría incluso ver acelerado si el estudiante no tiene crédito y no puede pagar por su cuenta). El alumno queda con la deuda por el crédito pero a la universidad no le interesa pues ya recibió su pagó y vendrán nuevos estudiantes en el futuro. Un ejemplo característico de esto es la Universidad de Phoenix en EEUU con un 9% de titulación.
Una "universidad" (da urticaria tener que llamar así a instituciones de esa calaña) con fines de lucro NO puede recibir aportes fiscales de ningún tipo. En Chile se debe comenzar por fiscalizar y enjuiciar a los delincuentes que han infringido la ley y luego acabar con el lucro para siempre en la educación. Gracias al rentable negocio de la enseñanza tenemos hordas de instituciones que venden humo, juegan con los sueños de la gente y los dejan endeudados y sin el ansiado título universitario que les daría el acceso el paraíso, es simplemente inaceptable. 

En mi opinión la educación pública debe ser gratuita, el gran argumento de los políticos es que esto es inviable económicamente y que es una "locura" o una "utopía". No he hecho la matemática pero pienso que con una reforma tributaria (y con la obvia fiscalización para que no se evadan impuestos) que obligue a los más ricos y a las empresas a poner más que los más pobres, además de establecer un impuesto real a las mineras extranjeras del cobre, se puede alcanzar el ansiado sueño de educación fiscal gratuita y de calidad, o al menos digna y que no sean 12 años de juegos, como dicen Los Prisioneros.

Este es el momento en que se ha estado más cerca de cambiar el sistema educacional, puede ser que se pierda un año académico, pero quizás gracias a eso hacemos que mucha más gente no desperdicie 12 o más en un sistema educacional que no le servirá de nada. No sirven más medidas para mejorar el sistema actual. Lo que tenemos ahora es un edificio con los cimientos mal hechos, por mucho que parchemos o pintemos las murallas, el edificio tarde o temprano caerá. Lo peor es que es casi una certeza, pero aún así parece que a muchos no les importa. Puede ser que seamos la generación de las utopías o un montón de inútiles subversivos, quizás es sólo el impulso de los jóvenes, pero lo que es innegable es el sentimiento de que la educación debe ser un derecho para toda la población, nadie debe quedar excluido de poder educarse dignamente por el sólo hecho de tener una determinada condición social. Para lograr esto es necesario reformar el sistema chileno desde las bases, no importa cuanto tiempo tome, hay que empezar en algún momento y por qué no ahora.

Adelante todos nosotros, los estudiantes chilenos, adelante por un futuro mejor y por un sistema educacional que no deje compatriotas pateando piedras y sin el futuro prometido en los 12 años de juegos, que no los deje bailando el baile de los que sobran.

"Y para qué?...para terminar bailando y pateando piedras..." 








domingo, 7 de agosto de 2011

"Where everything was as fresh as the bright blue sky"

Hace mucho tiempo que no escribía en el blog, a pesar de estar en paro indefinido en la facultad por el conflicto estudiantil y tener tiempo libre a causa de eso, he estado un poco flojo. Por alguna razón hoy fue un día particularmente nostálgico (en verdad ayer, pues ya son más de las 12 de la noche), le busqué justificación pero no la encontré, puede ser por eso o por la casualidad cósmica que escuché esa gran canción de los guns`n roses que me ayudó a darle título a esta entrada. Me motivé a escribir del pasado, no del histórico ni cultural, sino del propio, la idea es ver si ese dicho "todo tiempo pasado fue mejor" es tan cierto. Hasta este momento no lo comparto, quizás al terminar la entrada cambie de opinión.

Dado que el presente es "instantáneo", o sea que lo único presente es la milésima de segundo actual (ahora ya es pasado =(  ), podemos dividir todo en pasado y futuro, ya que el presente propiamente tal no es cuantificable, no lo suficiente para analizarlo. 
A partir de todo esto se me ocurre una primera dimensión de análisis del asunto, la inconsciente. Probablemente el pasado tenga mejor fama que el futuro dentro de nosotros porque obviamente es más fácil obtener buenas sensaciones y recuerdos desde ahí que de un futuro que no hemos vivido aún; del futuro sólo tenemos expectativas, nada concreto de donde aferrarnos, a pesar de la seguridad que podamos tener sobre cómo será no es nuestra seguridad lo que lo determinará. Visto así, el pasado parte con ventaja inconsciente, a pesar de los malos recuerdos que viven en él, siempre podemos sacar otros buenos que son tangibles y reales, aislando los malos. Otra forma rápida de acercase al tema es pensar que la aceptación o no de esa frase depende de las expectativas de vida de cada persona y su esperanza en el futuro, supongo que naturalmente una persona muy mayor o muy enferma no confiará demasiado en lo que viene y preferirá pensar en lo que ya pasó.

Otro vista más fría puede estar relacionada a la infancia. En general (hay muchos casos en que no es de esta forma), la niñez es el momento más feliz de la vida, donde no hay responsabilidades, donde los padres viven, aún más, para uno. Es donde las ilusiones existen y son parte de la vida, los reyes magos, santa claus, el conejito de pascua, el ratoncito de los dientes,etc. En la niñez no tenemos deudas, no sabemos que la gente se muere de hambre en el mundo, no tenemos que tener una carrera universitaria ni un trabajo, no sabemos que hay políticos que "dirigen" nuestra vida, no tenemos que desconfiar de la gente, y no sabemos que esas ilusiones como santa claus  son a veces generadas con el único afán de ganar algo, sólo vivimos la vida; y toda la niñez vive en nuestros recuerdos, es parte del pasado. Si lo pensamos, es casi injusto para el pobre futuro tener que competir contra tan noble y fuerte rival que se aloja en nosotros.  

En este momento cabe preguntarse si habrá en nuestra mente algo que sea un punto a favor para el alicaído futuro. Como lo mencioné antes, ahí mismo dentro de nosotros están los recuerdos negativos y creo que ahí los aliados del futuro son los eventos traumáticos que nos toca vivir. Los divorcios, las peleas familiares, las muertes de seres queridos o las decepciones amorosas son los momentos en que las personas sienten que "tocaron fondo", esa expresión lo dice todo, es sentir: A partir de aquí todo suma porque no puedo estar más mal. O sea el futuro tiene todas las de ganar contra el pasado. 
En este punto ya es posible darse cuenta de algo. Una opción para poder tener mejor estima del futuro que del pasado sería rememorar cosas que nos hicieron daño y esto, a pesar del gusto masoquista de algunas personas, no es una actividad común (ni sana) para la gente por razones obvias. ¿Para qué hacernos daño más de una vez con una situación que quedó atrás?. Esto ya deja al futuro con pocas chances, para quererlo más a él que al pasado, una forma es recordar cosas que no queremos o sentir que estamos en el fondo de un pozo. El gran y obvio "pero" es que el costo de hacer esto podría ser más que el beneficio de querer más al futuro.  
  
Otro aspecto para estudiar es pensar en una época de los recuerdos que podría favorecer a uno u otro competidor, la adolescencia. Es sabido por todos que es una edad complicada, la edad donde se forma el carácter y se define la personalidad; cualquier estímulo aquí es recibo e interiorizado por las personas, pudiendo afectarlas de cualquier forma. Dicho de otra manera, incluso el tener una adolescencia con bullying o sin él, con un primer amor correspondido o no, con un primer beso lindo o feo, etc; puede determinar la personalidad y visión de la realidad de una persona para siempre. Malas experiencias aquí pueden dejar una huella suficiente como para que las personas valoren siempre más el futuro que el pasado, o al revés. La adolescencia es un proceso caótico, esto es, depende fuertemente de las condiciones en que se lleva a cabo el experimento (varía según cada persona), por lo mismo es muy difícil estudiarlo.

Buscando en el corazón se puede encontrar un punto derechamente para el futuro, el amor a lo desconocido, la rebeldía y la libertad. Personalmente (esto da para otra entrada completa) creo que los seres humanos no somos animales para vivir de la forma que lo hacemos, sujetos a tantas reglas y formalidades, estructuras familiares definidas por alguien en un "olimpo intelectual"(?), como las formas de unirse "para toda la vida" (¿Cómo alguien podría garantizar, incluso a si mismo, responsable y racionalmente, querer estar con una misma persona para siempre?). Todos tenemos dentro la llama de la aventura, más o menos prendida según cada uno. Valorar lo desconocido y no temerle, es valorar el futuro, pensar que siempre tendremos la posibilidad de mejorar lo que hemos vivido, confiar en nuestra propia capacidad de moldear nuestra realidad. Armar planes que no sean sólo un sueño y vivirlos. He aquí el gran aliado de ver al futuro con mejores ojos que al pasado, el corazón. Si lo pensamos era esperable, confiar en el futuro no es un acto racional, puesto que no tenemos métodos fiables para asegurar que será de la forma que esperamos, y al no ser racional esta concepción no podía vivir en nuestra mente, necesitaba un lugar con más fuego que análisis.  

La frase dice "Todo tiempo pasado fue mejor". Determinar la veracidad o falsedad absoluta de ella no es posible, necesitaríamos estudiar la vida de cada persona a través de toda la eternidad y hacer la estadística, no creo que alguien tenga esa paciencia. Lo que cada uno puede hacer es tomar o dejar esta frase y concebirla como una opinión frente a la vida. Personalmente sigo sin tomarla para mí, no es porque haya pasado malos momentos en mi infancia o adolescencia, de hecho es todo lo contrario, es porque para mí aceptar esa frase es asumir desde ya que no podré mejorar mi futuro, es desconfiar de mí mismo y lo que puedo hacer. Recordar esa frase en los malos momentos es predisponerse a seguir pensando negativamente en el presente (ahora entendiéndose presente como el futuro muy cercano, no como instantáneo). Es más que seguro que muchos querríamos tener una maquina del tiempo para volver a vivir los momentos lindos que dejamos atrás o para cambiar cosas, yo quiero una pero como en la mayoría de las cosas lo mejor quizás sea el justo equilibrio. La combinación entre recordar y disfrutar todo lo bueno que vivimos, y tener suficiente fuego interno como para confiar en que podemos hacerlo mejor en adelante debe ser lo óptimo creo. Es lindo sentarse un rato a pensar en el pasado, pero tal como se dice cuando se enseña historia, tenemos que disfrutar lo bueno de él y aprender de lo malo para no cometer los mismos errores y poder así, construir un mejor futuro.



 EDO.



viernes, 25 de febrero de 2011

No pienses ni Cuestiones!!!

Probablemente ésta sea una de las últimas entradas que pueda escribir desde la tranquilidad de mis vacaciones, pronto empieza la universidad de nuevo e irremediablemente mi tiempo libre y lucidez para hilar ideas no-estudiantiles decaerá. El título es una burla, lo que me gustaría decir a mi es lo contrario (Piensa y Cuestiona!) pero parece que la sociedad ha recibido la orden tal cual como aparece aquí. Es de eso de lo que quiero hablar, de lo aletargada que parece la gente, sin ánimo de crear una teoría de la conspiración ni nada por el estilo.
Es difícil decidir por donde empezar, creo que un buen inicio sería mencionar las cosas que me hacen pensar que la gente no cuestiona la mayoría de lo que vive. Lo más seguro es que todo el asunto comience desde que uno es pequeño, la forma del sistema escolar. En general, se le enseña a los niños a aprender cosas de memoria, cosas que pueden no interesarles en lo más mínimo. De hecho uno podría cuestionarse el sistema mismo, partiendo por la idea de reunir a los alumnos por edad, todos sabemos que hay chicos jóvenes que saben más matemática que otros más viejos o menos historia o más ciencia, etc. ¿Por qué no hacer cursos según materia?. Pienso que los primeros años de educación deberían invertirse en hacer que los niños desarrollen pensamiento, capacidad de resolver problemas y capacidad creativa, en lugar de hacerlos aprenderse fechas históricas de memoria o reglas ortográficas. (El lenguaje es un medio, en ningún caso un fin) Por ejemplo, en el colegio nos obligan a leer ciertos libros, convencen a los alumnos de que ESOS y no otros son los "buenos" libros, a pesar de que a uno podría interesarle un carajo el tema, debe rendir una prueba sobre eso y ser calificado también. Luego si a algún niño no le gusta el Quijote, 100 Años de Soledad o la Hiliada está perdido. (Los 3 que nombre en mi opinión sí son buenos) Este ejemplo es extensivo a muchas cosas, los críticos te dicen qué películas son buenas, qué comida es buena, cuál es el mejor vino, qué cosas puede ver un niño y qué cosas no (asumiendo tontamente que todos los niños tienen el mismo criterio), etc. El problema no es que lo digan, es que la gente acepta y valora esas opiniones más que las propias. El mejor libro es el que más le gusta a uno y nada más.
A partir de ahí, la suerte está echada para la mayoría, el resto de la educación no hace sino convencer a los alumnos con malas notas de que son "malos alumnos" o que son "tontos". Eso es una generalización bastante estúpida (el decir que TODOS son tontos), lo que tienen esos alumnos es que no concuerdan con el sistema educacional, punto. No tiene nada que ver tener malas notas en un sistema educacional mal diseñado e impuesto con ser tonto, la implicancia no es directa. 
La educación superior parece ser la última alternativa para poder empezar a "pensar" en lugar de "repetir". Soy estudiante de ciencias, y si de mi dependiera le daría buena formación científica a toda la población (No de conocimientos particulares, sino de desarrollar pensamiento crítico y capacidad de cuestionamiento), para divulgar la idea de que uno no puede aceptar algo sin poder demostrarlo o comprenderlo de alguna forma. De lo contrario es muy fácil que nos vendan humo, si uno no se pregunta como y por qué funcionan las cosas entonces podemos decir que los microondas son cajitas mágicas o que el teléfono es un aparato extraterrestre.
Todo es parte del mismo circulo vicioso, tomemos a una persona que no tuvo buenas notas en el colegio porque, efectivamente, no encajaba en el "sistema", esa persona probablemente no entre a la universidad, no tenga un título y esté destinada para siempre a vivir pasando penurias, ¿Es justo que por no ser "valioso" para un sistema que ni siquiera eligió deba pasar una vida de tortura?
  
En este momento es cuando empiezo a pensar como los tipos de las teorías conspirativas y hay algo que comparto con ellos. A los gobiernos del mundo y a los dueños de las grandes empresas les conviene que la población sea como es, sumisa. Si la gente se detuviera un segundo en su vida para cuestionarse por qué la cosa está como está, ya no estaría así. El truco es tener a la mayoría de la población ocupada mucho tiempo, las grandes civilizaciones antiguas tenían tantos filósofos y pensadores porque había mucho tiempo libre para dar rienda suelta a la mente. Una persona que trabaja 50 horas a la semana ciertamente no dedicará sus ratos libres a pensar sobre la vida. Es por esto que la población es manipulable, por que están inertes y aletargados.

La publicidad, por ejemplo, es convencer a la gente que necesita algo que realmente no necesita. Decirle qué ropa "debe" ponerse para "estar en la moda", mostrarle "modelos" que seguir e idolatrar, etc. Así tenemos familias completas que dedican sus ratos libres a ir al mall a comprar "lo que sea".
Otro ejemplo, los políticos, que logran convencer a la gente de que comparten y luchan por sus derechos, nadie parece pensar que con la riqueza del mundo no debería haber ningún niño muriendo de hambre en ningún país o nadie sin hogar. ¿Por qué un padre con un sueldo insuficiente debe dejar de darle comida a sus hijos para pagar la cuenta de la luz y hacer más rica a una empresa? ¿Dónde están los políticos que nos iban a defender en ese caso?. 
Incluso se ha convencido a cierto sector de la población de que es "rebelde" o "va contra el sistema" o es "alternativo", es gracioso ver a los punk que critican el sistema usando poleras que fabrica un gran productor de ropa. O a los "alternativos" comprando todo tipo de accesorios (posters, parches, ropa, gorros, zapatillas, etc) para mostrarse diferentes siendo que así sólo fomentan lo mismo que están combatiendo. Un video cortito de regalo (abrir en otra pestaña) ¿Por qué te vistes así?


Las leyes, todos estamos sometidos a una legislación definida por estos mismos tipejos que dicen defendernos y representarnos, a pesar de podemos no compartir muchas de ellas debemos acatarlas. Es cierto, la mayoría de las leyes son útiles para poder establecer normas de convivencia sanas, pero hay algunas, o más bien la ausencia de algunas que hace pensar un poco más en el tema. Si no existiese la religión ¿Por qué sería malo que una madre que sabe que no puede darle una buena vida a su hijo aborte?. Para mi es ridículo pensar que porque hay un libro antiguo y un caballero canoso en Italia que dice que la vida es "sagrada" esa madre y ese hijo están condenados a tener una vida de sufrimiento. Lo mismo pasa con el matrimonio, ¿Por qué es sensato tener que contarle a la Iglesia o a un funcionario del Estado que uno está enamorado para que la cosa realmente tenga sentido?. Entiendo que para efectos prácticos como herencias y ese tipo de asuntos pueda servir, pero se ha convencido a la gente de que el matrimonio es la culminación sentimental de una relación, siendo que el amor existe con o sin firmar un contrato, y también de que dos personas del mismo sexo no pueden sentir amor el uno por el otro, una vez más me pregunto por qué toda la población tiene que acatar la versión de "familia" o de "naturalidad" que tiene una religión en particular. 
No quiero que este texto sea interpretado como un llamado izquierdista a la emancipación de la población y a la anarquía (No creo en los colores políticos, para mi izquierda y derecha son sólo formas de poder obtener lo mismo, votos). Sólo digo que si supuestamente el poder está en el pueblo deberíamos hacer que nuestros representantes defiendan nuestros derechos por sobre todo.
La democracia está sobrevalorada (no me parece justo decirle a la mitad menos uno de la población: "Jódete, nosotros somos la mitad más uno así que vives a nuestro antojo"), no es un buen sistema de elección de representantes, sólo es el menos malo de los que conocemos, a mi no se me ha ocurrido ninguno mejor pero probablemente alguien alguna vez de con algo que podamos usar.


Si siguiera enumerando situaciones no terminaría jamás, alguien me podría decir que todo este texto corresponde al típico sueño de juventud de "cambiar el mundo" y al respecto puede decir que probablemente así sea. Quizás sea ingenuo, pero creo que si las personas se levantaran en la mañana y en lugar de sólo salir a trabajar se preguntaran ¿Por qué hago lo que hago, realmente me gusta?, o si antes de pagar las cuentas usan su dinero para disfrutar la vida, podría haber un cambio. Lo que buscan las empresas y "los poderosos" (eso suena a teoría conspirativa) es tener trabajadores obedientes, con poco tiempo libre, que no cuestionen y que sólo hagan. 
  
 La principal herramienta es nuestra propia razón, no hay que dejar que la característica más maravillosa del ser humano, pensar, sea aletargada nunca, es el tesoro más valioso que tiene cada uno. Al final el mensaje que quiero dejar es que, para mi, es necesario comprender la vida y no sólo vivirla.
 Hay que pensar siempre! desde lo más básico como preguntarnos cómo funciona la televisión o el microondas, hasta el por qué hacemos lo que hacemos cada día. Para terminar una frase que pienso que resume bien todo: "Vivir en un mundo sin percatarse del significado del mismo, es como deambular por una gran biblioteca sin tocar sus libros" 

Hasta la próxima!
EDO. 
















martes, 22 de febrero de 2011

La matemática (mundo lindo) vs La realidad

En ésta entrada voy a hablar de otra de mis pasiones, el mundo de las matemáticas. Siguiendo la idea de no hacer que este blog sea un "diario de vida", voy a afrontar el tema desde la perspectiva más objetiva posible.


Con el título quiero decir varias cosas, primero que las matemáticas son una ciencia y un mundo muy noble y humilde, mucho más que el real. El "sistema" de este mundo se construye a partir de verdades "aceptadas" llamadas axiomasa partir de ellos se construye la teoría y se descubren nuevas cosas. A diferencia del mundo real, el matemático no impone nada, esas verdades están ahí y pueden ser tomadas o no, en cambio cuando nacemos de inmediato quedamos inmersos en un sistema que no hemos elegido, pero que la mayoría de las veces aceptamos sumisa e inconscientemente. ¿Por qué deberíamos ser parte activa y cooperar con algo que ni siquiera hemos elegido voluntariamente?


Supongo que ésta idea de alejarse de la vida real es una de las que más me cautiva. Uno puede o no, aceptar los axiomas matemáticos y la teoría en general, pero nadie puede negar que la matemática está impresionantemente vinculada con la vida real. La matemática me recuerda a las personas realmente geniales, que no necesitan hablar ni tratar de demostrar su genialidad, sino que desde la humildad de sus dichos pueden mostrar la espectacularidad de su mente.


Sin ningún ánimo de grandeza ni estúpida superioridad quiero tomar una frase del gran George Carlin para dar otra idea: "People are fucking boring"(haga click en este link, ábralo en otra pestaña). Pero quiero agregar cosas, Carlin dice que la gente es aburrida, pero creo que no es sólo eso, también la sociedad trae consigo todos sus vicios. El mundo matemático es puro, lógico, consecuente, digno y sincero, a pesar de ser una creación de la mente humana, las matemáticas no comparten los vicios de la especie. Si se quiere ver del lado filosófico, la mente mantiene una sana lejanía con el resto del cuerpo, puede ser que esa sea la razón.


Algo que realmente admiro de este mundo y odio del real es la desagradable tendencia a aparentar en lugar de ser del mundo real. Si vas a una entrevista de trabajo vestido de shorts y sandalias probablemente seas considerado peor trabajador que alguien que fue con traje elegante, ¿qué clase de estúpida irracionalidad es esa?. Si tienes un buen contacto puedes asegurarte el futuro a pesar de que no sirvas para nada. El mejor ejemplo de todo esto, los políticos. Les encanta aparentar grandeza y hablar con lenguaje bonito y maquillado, para esconder las pobres cosas que tienen que decir. La diplomacia, el lobby, las reuniones, son todas formas de mentirle sutilmente a la otra parte para poder lograr con poco esfuerzo algo. Al contrario de todo esto, al mundo matemático y científico en general le da lo mismo cómo te vistes, qué tan seguido te afeitas o cuantas palabras difíciles te sabes, porque en un mundo sincero nadie necesita aparentar cosas que no es, en las ciencias nadie será mejor visto si su ropa es más cara, lo que realmente importa es tu capacidad. Supongo que no es una característica sólo del mundo científico, pero si está ben representada allí. 


Otro tema importante, el dinero. En el mundo real eso es lo que mide tu calidad como persona, no importa si eres inteligente, esforzado, honesto o nada, si tienes dinero eres exitoso y vales la pena, de lo contrario no te toman en serio. Suena resentido pero junta dinero para ir al Hyatt, vístete de mendigo y entra al lobby pidiendo una habitación a ver que te dicen. Lo que quiero decir es que cualquiera puede tener dinero, es hacer un buen negocio y listo, no hay nada difícil ahí ¿Por qué eso debería convertirte en una persona valiosa?. La famosa "influencia" y el "poder" son conceptos ficticios que la gente acepta casi por inercia sin cuestionar nada.


 Creo que el tema daría para mucho más, pero creo que si sigo escribiendo comenzará a hablar mi pasión (aún más) y no mi razón, y no es la idea. Obviamente el mundo científico y matemático también tiene vicios, pero podría asegurar muchos menos, justamente por la forma en como funciona no deja que aparezcan algunas de las cosas más repudiables de la sociedad.

EDO 

miércoles, 9 de febrero de 2011

La dulce/ansiosa espera

Ha pasado muchísimo tiempo desde la última vez que actualicé el blog, temporalmente fue casi un año, pero espiritualmente fue una eternidad. No en el sentido de que haya sido un tiempo "demasiado" largo, sino que en este tiempo muchas cosas han cambiado, espero yo que para bien. Relacionado a esos mismos cambios en mi vida es que nace el título de esta entrada de reencuentro, es sobre lo que se siente en los momentos previos a comenzar una nueva etapa o un desafío. De antemano perdón por cualquier generalización fuera de lugar.

Tengo la impresión de que, en la vida en general, los momentos anteriores a la obtención o comienzo de algo son los más lindos (o feos) e intensos. El tiempo de coqueteo y conquista en una relación amorosa, la previa de un partido de fútbol, el momento antes de comenzar una prueba, los días previos al inicio de clases o de un nuevo trabajo, etc. Esos momentos se viven intensamente, usualmente las personas reaccionan de dos formas distintas ante la proximidad de un evento importante, una forma es deseando que el momento no llegue y la otra, al contrario, es contar cada segundo hasta la hora 0.

Una vez leí por ahí que la mayor parte de la felicidad que nos provoca un anhelo se pierde justamente cuando lo obtenemos. Personalmente no comparto 100% la frase, pero en parte tiene razón, porque al obtener lo que queremos estamos cambiando el antiguo estado intenso y de alerta por uno más relajado y con menos emociones, como la satisfacción del deber cumplido.

Desde mi óptica pienso que esta idea de que es más interesante el camino a la batalla que la batalla misma tiene cierta lógica. Para lograr la mayoría de las cosas que nos importan o que amamos debemos pasar por un largo proceso o bien tomar decisiones muy importantes, debe ser esto lo que hace la diferencia. El camino tortuoso o los fuertes cuestionamientos hacen que sea casi una consecuencia "natural" el obtener o no lo que ansiamos, y por lo mismo la sensación ya no es tan fuerte.

El asunto podría verse también por el lado de que, antes de obtener o concretar algo tendemos a idealizarlo o estigmatizarlo. En nuestra mente lo bueno es lo mejor y lo malo lo peor, pero cuando podemos tener acceso a lo que realmente ES sufrimos una "desilusión", porque no era ni tan mejor ni tan peor. No es culpa de nuestro anhelo ni del mundo sino de nuestra apaciguada (por nosotros mismos) capacidad de asombro.

Desde la comodidad de mis pensamientos puedo confesar que tengo la esperanza de esto no ocurra siempre, que aun haya cosas que puedan maravillarnos y remaravillarnos en el tiempo, para que nunca se pierda esa magia que nos hizo desearlas y pelear por ellas un día, probablemente esto dependa de cada uno, la capacidad de reencantarse, pero ojalá sea realmente eso y no que nos estemos acostumbrando a una dolorosa realidad.